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El futuro del trabajo subirá los salarios

27/03/18

El uso de robots será alto, (pero) los humanos decidirán adónde irá la automatización», analizó Walsh sobre el impacto de la tecnología en el mundo del trabajo.
Tiempo de lectura: 6 minutos

Su visión se centra en la idea de que el futuro traerá la oportunidad para que los humanos realicen tareas más creativas que hoy, incluso a cambio de mejores salarios. Para tener un lugar en ese mercado laboral dinámico y exigente, las personas deberán capacitarse cada cuatro años, a la vez que las instituciones académicas deberán enseñar para «las habilidades del futuro en vez de la historia del pasado», apuntó. Walsh visitó Montevideo para exponer en un evento global de Deloitte. Aquí, un resumen de su charla con El Empresario.

 

Algunos analistas alertan sobre la destrucción de empleos por sobre la creación de trabajo como resultado de la automatización y las nuevas tecnologías. Usted tiene un enfoque diferente, más positivo, cree que gracias a estos avances los humanos conseguirán mejores empleos en el futuro. ¿En qué basa esa conclusión?

 

Sí, creo que seremos capaces de conseguir mejores trabajos, porque la automatización y las tecnologías disruptivas simplemente reemplazarán tareas que las máquinas ya pueden hacer, con lo cual liberarán capacidad para que las personas hagan trabajos «más humanos», más creativos. Los robots nunca serán capaces de crear o reemplazar soluciones a problemas, usar el juicio, ser empáticos. Entonces, el crecimiento del uso de robots será alto, pero los humanos decidirán adónde irá la automatización. En los próximos 10 o 15 años se reemplazará el trabajo mecánico, que generalmente es el que los humanos no quieren hacer. Quieren hacer tareas donde puedan usar sus atributos, rasgos y habilidades. Entonces creo —y Deloitte también así lo siente— que hay un futuro mucho más positivo para todos en lo que es la cuarta revolución industrial.

 

¿Qué habilidades deberán tener las personas entonces?

 

Hemos hecho investigación y se requerirán habilidades ligadas a la solución de problemas, a la empatía, el juicio, el procesamiento cognitivo, que solo los humanos pueden hacer. Esos son los roles que tenderán a hacer mucho más en el futuro, porque las máquinas reemplazarán el alto volumen de actividades de bajo valor agregado que tenemos que hacer hoy.

 

«El crecimiento del uso de robots será alto, pero los humanos decidirán adónde irá la automatización. En los próximos 10 o 15 años reemplazará el trabajo mecánico».

 

Habla de roles de bajo valor agregado como los que se verán más afectados por estos cambios. Ahora, ¿qué industrias sufrirán más el cambio?

 

En realidad, creo que todas las industrias se beneficiarán de la disrupción y todas experimentarán una transición al avanzar hacia el futuro del trabajo. Es inevitable. No creo que haya ganadores y perdedores, porque estas nuevas tecnologías reemplazarán tareas dentro de procesos, no reemplazarán trabajos. Esa es una diferencia importante. De hecho, por causa de la tecnología han aparecido ya otros trabajos y roles como el del community manager, por ejemplo, que antes no existían. En definitiva, van a cambiar algunos roles y al mismo tiempo seguirán surgiendo otros nuevos.

 

¿Qué tipo de empresas se están adaptando mejor a esta era disruptiva? ¿Qué tienen en común estas compañías?

 

Es interesante lo que pregunta, porque no hay realmente ejemplos de áreas en las que todos lo estén haciendo bien. Las mejores compañías son las que están experimentando con las nuevas tecnologías y están construyendo músculo y memoria corporativa para entender las implicaciones de estos desarrollos y cómo pueden sacar mejor provecho de ellos. Claramente, las empresas de tecnología no tienen la historia corporativa de otras organizaciones tradicionales, entonces, son capaces de empezar desde cero y así es más fácil. Es mucho más difícil para las organizaciones tradicionales avanzar hacia el futuro del trabajo, porque tienen un sistema legado.

 

¿Las empresas tradicionales comparten la visión optimista que usted promueve?

 

En este momento hay empresas, gerentes y líderes que probablemente están un poco confundidos por lo que han escuchado sobre la automatización y no saben cómo desenmarañar eso para entender qué hacer a continuación. Creo que tenemos una muy clara narrativa que básicamente está incentivando a la gente y a las organizaciones a experimentar y crear esa memoria y músculo. Ahora, no hay un santo remedio; tienes que crearlo para ti mismo. Cuanto más experimenten las organizaciones, más cómodas se sentirán las personas con estas tecnologías y reconocerán las oportunidades, los casos de uso. Y es concebible que en cinco años el 25% de los trabajos realizados por las organizaciones será automatizado, aunque en diferentes maneras, porque los procesos de cada uno son distintos.

 

Es concebible que en cinco años el 25% de los trabajos realizados por las organizaciones será automatizado».

 

Es de esperarse que además de impactar a la economía en términos de generación y supresión de puestos de trabajo, la automatización también influya a nivel del salario. ¿Qué perspectiva avizora?

 

Hicimos una investigación en el Reino Unido donde miramos el impacto de la tecnología en el período que va entre 2001 y 2015, y descubrimos que la tecnología había causado la pérdida de 800.000 puestos de trabajo, pero (a la vez) creó 3,5 millones de empleos con un salario promedio de 10.000 libras más alto que antes. Entonces, podría decirse que el futuro del trabajo aumentará los salarios, no los reducirá, porque muchas actividades de bajo nivel serán realizadas por los robots.

 

Deloitte está utilizando herramientas sofisticadas, por ejemplo, basadas en Inteligencia Artificial, para la selección del talento. ¿Cómo la tecnología está redefiniendo el rol del departamento de RR.HH.?

 

Para que las organizaciones avancen hacia la fuerza laboral «aumentada», RR.HH. también necesita dar el ejemplo e introducir tecnologías disruptivas en sus servicios para poder liberar más tiempo y así agregar más valor al negocio, para ayudarlo a transformarse de cara al futuro del trabajo. La introducción de estas tecnologías en RR.HH. no es diferente de lo que sucederá en las líneas de producción y otras funciones internas, pero RR.HH. tiene la oportunidad de liderar su propia función para que sea más consciente y capaz de apoyar y habilitar al resto de la empresa el avance en el viaje digital.

 

El volumen gigantesco de datos que son utilizados en las pesquisas de las consultoras, ¿no representa en algún punto un problema para los selectores de talento? ¿Cómo convierten datos en información valiosa para decidir?

 

Sintetizar todos estos datos sigue siendo un desafío. La estadística que se destaca para mí es que solo se utiliza el 1% de todos los datos recopilados. El valor real del análisis, la evaluación y el uso de los datos es aumentar ese porcentaje —del 1% al 30%, 40%, 60%— para que se utilice más data relevante y útil para tomar decisiones. Con la solución cognitiva que hemos estado desarrollando, tratamos de reducir el «ruido» en torno a los datos y centrarnos en los puntos más críticos.

 

Hoy las consultoras utilizan solo el «1% de todos los datos recopilados. El valor real del análisis, la evaluación y el uso de los datos es aumentar ese porcentaje para que se utilice más data relevante y útil para tomar decisiones».

 

Dadas las características cambiantes del trabajo en el futuro, ¿cuál será la «esperanza de vida» de los empleos?

 

Creo que las carreras se extenderán de 30 o 40 años a 50, 60 y quizás incluso 70 años en el transcurso de las próximas décadas. Al menos eso sucederá durante una generación, a medida que la gente viva más tiempo y los sistemas de salud respalden a las personas que vivan hasta los 100 años, entonces las carreras claramente se extenderán también. 

 

¿Qué tipo de trabajos se imagina que harán las nuevas generaciones?

 

Quienes nacen hoy estarán haciendo trabajos que no saben qué son porque ni siquiera han sido creados todavía. Y eso muestra cuán lejos se están moviendo las cosas. Pero esos empleos muy probablemente no sean del tipo mecánico sino humano. Serán muy interesantes, realizadores, y quizás eso marque una diferencia respecto a mi generación y a la suya también, (porque) cuando entramos al mercado de trabajo, todos esperábamos cumplir roles donde en realidad encontrábamos su flujo de trabajo bastante aburrido, completando nuestro horario, rellenando formularios. Las máquinas pueden hacer eso.

 

¿Las instituciones educativas están preparando ya a los jóvenes para ese futuro?

 

Creo que el hecho de que las personas aprendan nuevas habilidades durante toda su vida es una cosa segura. Y en ese sentido, las instituciones académicas necesitan enseñar para las habilidades del futuro en vez de la historia del pasado. Estimo que las instituciones tienen como responsabilidad pensar qué habilidades necesita la gente, porque deben aprender nuevas habilidades para el trabajo y (también) seguir aprendiendo. En segundo lugar, las entidades de gobierno y las corporaciones deben reconocer que tienen también una responsabilidad de capacitar a todas las personas con habilidades de empleabilidad en una base regular. Con la vida media de las nuevas habilidades cayendo a entre 2,5 y 5 años, todo el mundo necesita volver a capacitarse cada cuatro o cinco años. Y creo que las mejores compañías para trabajar en el futuro serán las que tengan la mejor capacidad de aprendizaje y las personas que adhieran a eso, porque son una «máquina de aprender», obtendrán un beneficio para toda la vida. Eso se convertirá en la nueva marca empleadora, según mi visión.

 

Las instituciones académicas necesitan enseñar para las habilidades del futuro en vez de la historia del pasado».

 

Algunos creen que hará falta una renta básica universal para aquellos que pierdan su trabajo por culpa de la automatización. ¿Cuál es su posición al respecto?

 

Para serle honesto, creo que es un camino pero no la solución definitiva porque creemos que el futuro del trabajo creará oportunidades masivas para todos. Y depende del gobierno pensar cómo cobrarle impuestos a la economía, a quienes trabajan tiempo completo, pero también hay muchos freelancers y contratistas, entonces tienen impuestos diferenciales. Se necesita solventar los servicios públicos, entonces requiere un modo de cobrar impuestos de forma justa. El ingreso básico universal parece ser una herramienta poco refinada para resolver el problema de los robots. ¿Cómo resuelve el problema llamado procesamiento de lenguaje natural y machine learning? ¿Cómo grava a una app que está en su teléfono? Es muy difícil. Y la otra idea era dar a todos un ingreso de unos 600 euros. Pero ¿cómo lo implementa? Es una solución pero se basa en la idea de que el incremento de los robots va a eliminar empleos y nosotros no creemos eso.

 

 

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