Eduardo Mangarelli es uruguayo, pero debe ser de los compatriotas más compartidos en el mundo. Como si fuera un futbolista, es el Luis Suárez de las empresas informáticas. Gerencia el área de innovación y tecnología de Microsoft en América Latina, y lo hace desde Montevideo. Obviamente que interactúa con Bill Gates, pero no le impide hacer su tiempo para llegar a Durazno y brindar una charla magistral de 40´ en el salón de actos de la UTEC. Fue en el marco de la 1ª edición de U-Tech, días atrás, y mientras le reclamaban desde la mega reunión de Endeavor en la capital del país.
Apasionado como docente y como ingeniero de sistemas, cada frase es un concepto de aprendizaje –especialmente para los estudiantes de Tecnologías de la Información que aprenden en la ciudad capital del centro del país-.“Se debe democratizar el acceso a la formación y educación alrededor de la tecnología. El impacto de la tecnología, en una realidad donde el futuro es hoy, el futuro sucede cada vez más rápido. Y para los vinculados a la tecnología y los que están hoy formándose en la misma, compartir el enorme escenario de oportunidades a nivel local y regional y global sobre las cuales podemos pensar y aspirar”. Con estas palabras comenzó su charla, ante un auditorio repleto. Luego planteó ejemplos. Para llegar a los primeros 50 millones de personas, al teléfono le insumió 75 años. A la radio 38 años. A la TV, fueron 13 años. A internet llegar a 50 millones de personas le llevó 4 años. A Pokemon Go le llevó una semana llegar a los 75 millones. Las cosas suceden cada vez más rápido, dijo entre cálculos el informático.“Esto podemos traspolarlo a que las cosas que suceden en otros países, en otro lado, pero la realidad es que la globalización y la modificación de las necesidades de habilidades para el mercado laboral se expanden y suceden cada vez más rápido. La necesidad de talento y formación se expande cada vez más rápido, por eso es más relevante conversar sobre ello”, luego planteó algunos fenómenos del impacto de la tecnología hoy. “Es un generador de diferenciación, de valor, de disrupción. Esta palabra ha tomado cierta característica de moda, es un cambio grande y abrupto en un modelo de negocio particular. Netflix ha sido un generador de disrupción en la industria del entretenimiento. Comenzó alquilando videos, luego creó streaming y hoy crea contenidos a nivel global. La realidad es que si pensamos en agro, finanzas, salud, educación, transporte, medios de comunicación, en cada industria podemos encontrar varios ejemplos de compañías que en base a la tecnología buscan generar una diferencial de valor. Mejora de la eficiencia de cómo esa tarea se realiza, satisfacer una nueva demanda de usuarios y consumidores. La tecnología es uno de los principales generadores de valor en cualquier industria de la que hablemos”.
LA TECNOLOGÍA AL SERVICIO
Mangarelli citó que “compañías internacionales trabajan sobre tecnologías nacidas en la región, no es el futuro, es la realidad de hoy. Desde un auto que puede conducir sólo en ciertas condiciones, por ejemplo. Sucede por el desarrollo de un aspecto de las ciencias de la computación, computer vision. Es una disciplina dentro de la rama de la inteligencia artificial, y por detrás de esto hay programadores que desarrollan el software para ser capaces de interpretar en tiempo real las imágenes, y entrenar a la computadora para tomar decisiones. Lo que hay detrás de esto son ciencias de la computación, software e inteligencia desarrollada. El tipo de tecnología detrás de esto no es más complejo de aquella a la que cualquier estudiante de TIC en Durazno puede ingresar para desarrollar prototipos”.Planteó como segundo ejemplo interesante para compartir en esto de la disrupción a la compañía Monzo, una empresa inglesa de 30 personas. Tiene la licencia del Banco Central de Inglaterra para operar como un banco. No tiene sucursal ni caja fuerte, es una aplicación, una gran cantidad de sistemas en la nube y desde ahí brinda un servicio específico en forma extraordinaria: administra cuentas de pago de sueldos. “La compañía extrae inteligencia de la información, y comienza a decirme cosas del estilo ´puedes gastar en esto´ o ´te recomiendo comprar esto´. Busca proveer un servicio en forma extraordinaria. Nace desde lo digital y aprovecha al máximo las capacidades de lo digital, analizando información busca romper la ecuación dando un valor diferencial para sus usuarios. Analizar información está dentro del marco de lo que podemos denominar hoy inteligencia artificial. El principal generador de disrupción desde la tecnología es la inteligencia artificial. La misma es transversal a cualquier tipo de negocio donde estemos”. Allí citó una startup uruguaya, Agronóstico, que se dedica a analizar los datos históricos de producción agrícola en granos para combinar con tipo de suelos y clima, y proyectar rendimientos y proveer sugerencias sobre semillas y demás. “Es una industria primaria, y el fenómeno de inteligencia artificial se aplica también a ese escenario. Si hoy veo cómo ha disminuido el grado de error de la detección e interpretación del lenguaje hablado, estamos en que una computadora escuchando a una persona tiene un grado de error del 4,9%. En noviembre del 2016 logramos que el grado de error sea menor que el error humano, hemos perfeccionado la interpretación del lenguaje hablado comparado con el error humano. Muestra el grado de evolución exponencial y así podemos proyectar a cuán más preciso y certero podrá ser de aquí a 6 meses o un año”, concretó.
AQUÍ Y ALLÁ, TECNOLOGÍA
Formado como ingeniero de sistemas, creó su primera empresa a los 19 años junto con un socio. Tuvo el aprendizaje formal y el de la práctica, día a día. Hoy tiene equipos de personas distribuidos bajo su cargo en toda Latinoamérica. Vive en Uruguay con la responsabilidad para una empresa global como es Microsoft. Llegó a Durazno acompañado de su laptop, una botella de agua y muchas ganas de enseñar.“La primera reflexión a veces es que las cosas se usan en otro lado, pero democratizamos el acceso a la inteligencia artificial. Hoy hay un conjunto de servicios para el reconocimiento facial, para identificar personas, para pasar texto a voz, o viceversa, para armar un sistema de recomendaciones donde cualquier compañía que vende productos te asocia intereses de compra. Desde Microsoft buscamos proveer esta inteligencia paquetizada para que cualquier compañía acceda sin necesidad de desarrollar cada pieza. Hay una compañía uruguaya que vende servicios para Australia, Europa y EEUU entre otros mercados, y provee el punto electrónico de ventas. En una tienda, el vendedor le puede cobrar con el teléfono sin necesidad de pasar por la caja. Eso lo hacen con un Iphone, y encontraron que el vendedor a la hora de cerrar la compa debía certificar la compra. Entonces incorporaron el reconocimiento facial, utilizando la misma tecnología que usa Uber en el mundo. Es una empresa uruguaya que aprovecha la misma tecnología que Uber, y tiene que ver con la globalización y el acceso a capacidades tan potentes como puede ser el reconocimiento facial”. Siempre con ejemplos concretos, aportando nombres de empresas de acá que cotizan allá.“Cuando hablamos de inteligencia artificial, aplica a todas las industrias. Cuando Netflix nos recomienda qué ver, detrás está la inteligencia artificial. Cuando Facebook nos recomienda algo, detrás está la inteligencia artificial que aprende de cuáles cosas nos interesaron y ordena la información de acuerdo a nuestros intereses”.
AL FINAL, CONOCIMIENTO
Uniendo puntos, claramente la tecnología evoluciona en forma exponencial. Las cosas que hace 10 años eran imposibles de realizar, hoy son realidad. Eduardo Mangarelli, de 42 años de edad, le habló en UTEC a los estudiantes de tecnología. “Nuestro conocimiento tiene que evolucionar en forma exponencial. Parte de lo fascinante hoy es el acceso a la información hoy, además de la educación que podemos recibir en UTEC, si hoy entro a Coursera –platafoma online- me encuentro con cursos que puedo tomar en forma gratuita desde universidades de Estados Unidos. No sustituye, pero complementa lo que estudio aquí. La riqueza de la disponibilidad de contenidos y recursos online depende de cada uno de nosotros el hacer el ejercicio y disponer mi energía. Los recursos están ahí, disponibles. El desafío está en priorizar y cómo invertimos nuestro tiempo. Hay que ser multidisciplinarios para enriquecer nuestras habilidades. Debemos pensar global, buscar oportunidades en el mundo”, concluyó.
Fuente: ElAcontecer
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