Actualmente, las empresas tienen la tentación de probar nuevas maneras de llevar a cabo su actividad en lo que respecta la Transformación Digital. En este sentido, aparecen nuevos términos como Agile.
Transformación Digital, punto de arranque de las organizaciones
En esa Transformación, el cambio de la cultura de las personas es el elemento clave y a su vez el más difícil de conseguir. En estos procesos, se suele perder mucho el foco, se cambia múltiples veces de metodología, tecnologías y herramientas sin tener en cuenta que la actitud hacia el cambio parte de las personas que forman la compañía.
A la hora de establecer una nueva cultura, es importante tener en cuenta dos pilares:
· Cambio de mentalidad de las personas
· Conseguir que la empresa incorpore en su cultura y valores esta nueva mentalidad
Valores y principios del Manifiesto Agile
Los valores y principios del Manifesto Agile y su interpretación en los diferentes frameworks o métodos con los que se trabaja, como Scrum o Kanban, son la base sobre la que podemos hacer funcionar un equipo Agile. Si no se entienden los procedimientos y objetivos de estas metodologías, estaremos lejos del éxito de iniciativas y proyectos.
La ilusión y motivación es esencial a la hora de comenzar nuevos proyectos. Esta misma actitud tienen que prolongarse en el tiempo, al margen de posibles contratiempos que obstaculicen nuestro camino.
En muchos casos, no se tiene en cuenta el momento de incertidumbre ante posibles contratiempos que todo cambio conlleva, el cual hace que, antes de llegar al estado de mejora que buscamos, nuestra productividad se vaya a ver temporalmente resentida por el cambio que estamos llevando a cabo. Durante este proceso, aunque resulte difícil verlo, suele aumentar competitividad de las personas y, como consecuencia, la de las organizaciones.
La transformación parte de la cultura empresarial
Existen unos factores clave para comenzar la transformación:
· Conocer a las personas que forman parte del cambio, es decir, las personas de dentro de la organización.
· Diseñar un plan de comunicación adecuado, en el que se aclaren todos los puntos importantes del cambio.
· Definir nuevos roles como el Scrum Master o el Product Owner y sus responsabilidades.
· Delimitar un plan de capacitación que dote a los implicados del conocimiento y de la habilidad para poner ese conocimiento en marcha.
· Formaciones y sesiones experienciales en las que se explique qué hacer cuando las cosas funcionan adecuadamente o cuando no, es determinante para cambiar la mentalidad.
El esfuerzo personal, también elemento clave para el cambio
Por otro lado, todo cambio requiere un esfuerzo personal de los implicados, por lo que es necesario recompensar a las personas que participan en estos procesos. E
En definitiva, cuando hablamos de una Gestión de Cambio Agile dentro de una organización no basta con enseñar Scrum o Kanban como forma de reorganizar el trabajo. Muchas organizaciones actuales están altamente procedimientadas y disponen de herramientas en las que han implementado estos procedimientos.
Desde el área de People o Recursos Humanos, se ha de promover este cambio a través de herramientas que faciliten la aceptación, el conocimiento y la interiorización de estos cambios. Los tiempos cambian, las personas también y los procedimientos han de adaptarse. Nos cambian de mentalidad y metodologías con una alta frecuencia por lo que debemos permanecer abiertos y flexibles y tolerantes ante cualquier cambio.
La resistencia por el cambio provocará que las organizaciones no se adapten y pierdan competitividad en un mercado para vez más exigente.
En atSistemas, ayudamos a empresas de todos los sectores en su proceso de Transformación Digital. Promovemos el cambio a través de nuestros especialistas consultores, técnicos, gerentes, ingenieros…
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