La pandemia ha obligado a la mayoría de las empresas a adentrarse e un proceso de transformación digital.
Una de las principales áreas de transformación digital de las empresas ha sido y esta siendo el cloud computing. Según IDC, el mercado de cloud computing triplicará su volumen de negocio en 2023 y en 2028 se espera que su inversión alcance el 80%.
Son cada vez más microempresas y pequeñas y medianas empresas que utilizan el servicio de cloud computing y según nuestros profesionales en atSistemas, se trata de una tendencia que irá en aumento en los próximos años.
Desde atSistemas, analizamos los principales factores a tener en cuenta por las pymes para identificar e incorporar en su empresa el modelo cloud que más se ajuste a sus necesidades.
Infraestructura como servicio (IaaS):
La flexibilidad, escalabilidad y seguridad son tres características básicas de este modelo de servicio cloud. Uno de los beneficios que tiene este modelo es que las empresas no tienen que gestionar los costes de ser propietarios de una infraestructura de IT, ya que reciben acceso a un centro de datos virtual a través de una plataforma.
Las empresas pueden reducir o aumentar recursos según sea necesario. En cuanto a la seguridad que ofrece este modelo, nadie puede acceder a los datos guardados a pesar de estar almacenados en un servidor externo.
Platform as a Service (PaaS):
Para aquellas empresas que busquen un servicio más personalizado a sus necesidades, este es el modelo de cloud adecuado.
En lugar de ofrecer software o aplicaciones como el SaaS, en este caso el proveedor ofrece una plataforma completa (hardware, software e infraestructura) en la que se pueden desarrollar, ejecutar y administrar aplicaciones evitando la complejidad de mantener la plataforma en las instalaciones.
Software as a Service (SaaS)
Este modelo proporciona una fácil integración y compatibilidad con las empresas.
Los startups startups y pequeñas empresas optan por este modelo de cloud computing ya que por requerimientos de negocio desean poner en marcha sus operaciones lo antes posible.
Entre otros beneficios, sus aplicaciones son accesibles desde cualquier lugar del mundo y las pymes no tienen que gestionar el software.
Functions as a Service (FaaS)
Este modelo pertenece a la categoría de Cloud Computing Services (CCS). Ofrece a las pymes una plataforma en la que pueden desarrollar, utilizar y manejar aplicaciones, sin la necesidad de los costes de mantenimiento y creación de la infraestructura. Es un modelo perfecto para las pymes que se encarguen del desarrollo. Ofrece una gran escalabilidad manejado por el proveedor.
FaaS se centra en el paradigma de la computación impulsada por eventos en el que el código de la aplicación o los contenedores solo se ejecutan en respuesta a eventos o solicitudes.
Container as a Service (CaaS)
CaaS es un modelo de cloud computing que permite a los usuarios cargar, organizar, iniciar, detener, escalar y administrar contenedores, aplicaciones y clústers. Las empresas pueden construir aplicaciones en contenedores escalables y seguras a través de centros de datos locales o la nube. Su principal ventaja es el nivel de seguridad que ofrece.
Nuestra visión como expertos
Antes de lanzarse a por cualquiera de los modelos de cloud computing nombrados anteriormente, las pequeñas y medianas empresas deben hacer un estudio y evaluación de necesidades tecnológicas reales. Una vez realizado este ejercicio se conocerán las verdaderas necesidades en este aspecto para posteriormente implementar la tecnología que mejor se adapte a sus necesidades.
Pedro Gallardo, Director de Desarrollo de Negocio de atSistemas destaca: “La selección de cada modelo de cloud no solo depende del tamaño de la empresa, se debe tener en cuenta las necesidades de la misma. Es por ello que recomendamos un análisis concienzudo de sus necesidades presentes y futuras para poder seleccionar un modelo de cloud que les sea útil a medida que la empresa vaya creciendo.”
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